jueves, 18 de abril de 2013

Soldados de batallas ideológicas

Hoy he tenido la enorme suerte de asistir a una charla del historiador Julián Casanova en la que nos ha leído un pasaje de su último ensayo, España partida en dos. Creo que hay libros que deberían ser de lectura obligada y éste es, desde luego, uno de ellos, especialmente en los tiempos turbulentos que nos están tocando vivir.

Espero que este pequeño fragmento os conmueva de la misma manera que me ha conmovido a mí.

Muchos de estos voluntarios que lucharon en el bando de la República se encontraban en paro, pero otros muchos dejaron sus trabajos. Había también aventureros en busca de emociones, intelectuales y profesionales de clases medias, que son los que después narraron en libros sus experiencias. La mayoría, no obstante, tenía claro que el fascismo era una amenaza internacional y España era el lugar apropiado para combatirlo. Así se lo decía un trabajador inglés, ni poeta ni intelectual, en una carta a su hija, reproducida por Watkins en su estudio sobre la división que la Guerra Civil ocasionó en la sociedad británica: "Quiero explicarte por qué dejé Inglaterra.  Te habrás enterado de la guerra que hay aquí. De todos los países del mundo, gente obrera como yo han venido a España a parar al fascismo. Así, aunque estoy a miles de millas de ti, estoy luchando para protegerte a ti y a todos los niños de Inglaterra, así como a la gente de todo el mundo."

España partida en dos, Julián Casanova.